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Para empezar asegúrate de que el largo de los vellos sea al menos de unos tres milímetros para que la cera lo coja sin problemas. Si es más corto no se va a eliminar en su totalidad y vas a sufrir ‘el tirón’ sin que quede perfecto.
Evita que tu piel esté impregnada de aceites o cremas para que la adherencia de la cera sea óptima. No uses cremas por lo menos unas 12 horas antes de depilarte.
Es importante para las mujeres no hacerse este tipo de depilación ni unos días antes, ni durante ni unos días después de la menstruación pues es más doloroso y la piel de la zona está mucho más sensible de lo normal.
Después de la depilación es conveniente utilizar un antiséptico, como el Gel postdepilación. De esa forma se reduce la hinchazón, refresca la piel y se cierran los poros.
Debes asegurarte de que el sitio donde te vayan a depilar esté impecable, la camilla, la bata del profesional… y es fundamental que la cera que vayan a usar sea nueva, es decir, que no la hayan usado antes con otra persona y la hayan colado, pues puedes coger una infección, hongos, etc. Aunque esta práctica está prohibida por sanidad no está de más que te asegures.
Los resultados varían de una persona a otra. Para algunos el vello puede tardar en salir tres o cuatro semanas y para otros puede empezar a salir en diez días. Ten en cuenta que es probable que sientas picor cuando el vello empiece a crecer, pero es algo normal así que no te asustes.
Si ves que algún vello queda enquistado masajea la zona con una crema exfoliante o un guante de crin.

La eliminación del vello ya era una técnica habitual que utilizaban las mujeres en las antiguas civilizaciones. Nos cuenta la historia que en Mesopotamia ya usaban sistemas depilatorios, pero es de Egipto de donde nos llega la fórmula de la pasta que utilizaban para depilarse: agua, azúcar y limón se trabajaban hasta que se conseguía una masa pegajosa que se moldeara con facilidad. La fórmula es realmente tan eficaz que ha llegado hasta la actualidad. Este método se fue extendiendo por toda la zona árabe.

En Roma utilizaban aceites y resinas para elaborar sus ungüentos depilatorios. Los métodos que se utilizaban en la antigua Grecia no arrancaban el vello de raíz sino que lo cortaban, usaban cremas y navajas. Y así llegamos a la década de los años 30, cuando aparecen los primeros fundidores de cera, a partir de aquí la industria no ha dejado de investigar y ofrecer novedades que facilitan el trabajo de la esteticista y mejora los resultados

Cuanto tiempo debe pasar entre depilacion laser

Son muchos los factores de los que se ha hablado en relación a la depilación por láser. El tipo de láser (depilacion laser alejandrita
, diodo, rubí etc.), las diferentes modalidades de centro (estético, clínica médica, franquicias, peluquerías…) los tipos de vello y de piel y hasta las medicaciones incompatibles con el tratamiento. Sin embargo hay un elemento que no siempre es bien ponderado pero que tiene una importancia primordial en el éxito de la depilación: el manejo del tiempo entre sesión y sesión.

¿Por qué es tan importante? El vello que recubre nuestro cuerpo pasa por varias fases: anágena, telógena y catágena y no todos los vellos de una misma zona están en la misma fase de crecimiento (o sea, que el crecimiento no es sincronizado). Como el tratamiento de depilación por láser sólo es efectivo en los vellos cuya célula germinativa (folículo) contiene melanina, se da la circunstancia de que sólo los vellos en fase activa de crecimiento (anágena) son destruidos.

Cuanto tiempo depilación laser

Si repetimos las sesiones cada mes, como se indica en algunos establecimientos (entre ellos las franquicias), no damos tiempo a que los folículos que estaban en fases de reposo pasen a fase activa. Tampoco dejamos que el pelo asome por fuera de la epidermis, lo cual es necesario para que la depilación por láser tenga éxito, pues ese milímetro que sale fuera es la “antena” que transmitirá la luz de láser hasta el interior del folículo, destruyéndolo.

Por tanto resumimos diciendo que es necesario esperar lo suficiente entre sesión y sesión para que el resultado sea efectivo. Porque hayan crecido unos cuantos pelos no es motivo suficiente para realizar una nueva sesión, que sería contraproducente porque muchos vellos que no han salido a la superficie serían debilitados pero nunca destruidos, produciendo un vello residual del que nos va a ser muy difícil deshacernos.

En los Centros Médicos de prestigio, con personal especializado y que no se mueven por criterios de máxima explotación del bolsillo del paciente, se aconsejan las sesiones de depilación láser facial cada cuatro semanas como mínimo, y las de corporal a partir de dos meses en adelante. Siempre tendrá que haber un examen previo que determine la idoneidad del momento para realizar una nueva sesión. Estos lapsos de tiempo pueden llegar a los seis meses en zonas de espalda o piernas, cuando ya se han realizado varias sesiones.